Todo ser humano que alcanza la edad de comprender la razón de ser del dinero quiere conseguirlo. Pero quererlo no basta. Hay que desear la riqueza con un estado mental que se convierta en una obsesión
Piense y hágase rico inauguró una nueva época. Salvando las obvias distancias temporales y culturales, buena parte de los libros de negocios y autoayuda actuales son deudores del enfoque pragmático y la metodología práctica expuestos por Napoleon Hill, así como su estilo directo, personal y exhortador.